De nuestra Visión

“Ser testigos de Jesús tanto como, en el Sector norte de Antofagasta, en toda la ciudad, la región, en nuestro país y donde nos lleve el Señor; para hacer Discípulos, enseñarles sobre la voluntad de Dios en la Biblia y bautizarles; Hasta el día que Nuestro Señor vuelva a buscarnos”.

De nuestra Misión


“Alcanzar a las personas que nos rodean, con el mensaje de Jesús, incorporándolos a la Iglesia para que conozcan y desarrollen sus Dones y talentos a fin de que los pongan al servicio de Dios y del cuerpo. Y así cumplir la Gran Comisión de manera integral”.

La iglesia y la Crisis ¿Sorpresa u oportunidad?

jueves, 2 de abril de 2009

Estos últimos días hemos estado viviendo días de drama global. La opinión general es que nuestro mundo está en crisis. Antes pensábamos que la crisis era algo abstracto. Hablábamos de guerra, hambre, contaminación, pobreza, depresión y una larga lista de situaciones que eran lejanas. Pero hoy parece que el televisor, Internet y el diario han llevado la crisis dentro de nuestro hogar. Algo sorprendente es que los periódicos tienen información acerca de quienes ganan y quienes pierden con la crisis; no quienes ganan evitándola.

¿Sorpresa para la iglesia?

La Biblia revela que vivimos en una creación caída que “gime a una, y a una está con dolores de parto hasta ahora” (Romanos 8:22). Jesús dijo que antes de Su segunda venida al mundo, este se caracterizaría por “guerras y rumores de guerras… hambres, y terremotos en diferentes lugares (Mateo 24:6-7). La crisis es la expresión lógica de una creación que ya no está centrada en su Creador. ¡La crisis es inevitable en un mundo caído!

Romanos 1: 20-22 “Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa. Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido. Profesando ser sabios, se hicieron necios…” Todo país y persona que se niegue a dar gloria y adoración a Dios sufren las consecuencias lógicas por vivir esa vida, en otras palabras la Crisis es producto del olvido de Dios.

Romanos 1:25 ya que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y dando culto a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los siglos. Se cambia la verdad por la mentira y finalmente llegan a adorar y servir a cosas creadas. El hombre comienza a adorarse a sí mismo, a cosas materiales, al ambiente, etc.

Romanos 1:26, Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas; pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza. La norma sobre la que se sostiene la sociedad llega a ser la lujuria, anarquía moral y degradación (vss 26-32).

El caos moral es el centro de la crisis, debido a que sin moral absoluta no hay recursos adecuados para responder satisfactoriamente a las crisis de relaciones, crisis sociales, internacionales, y/o ambientales. La crisis, entonces, se origina en cuestiones morales no en situaciones financieras.

Note el proceso en este pasaje.
1. Individuos o países se niegan a reconocer a Dios, eso lleva a crisis.
2. Ellos comienzan a adorar y servir a la creación
3. Finalmente Dios los deja al control de su lujuria natural, la que provoca anarquía moral y degradación humana, es decir al fracaso.

Este patrón ha sido experimentado por la humanidad muchas veces en la historia. Podemos estar muy contentos de que la iglesia evangélica sea reconocida y que un día sea feriado en honor a la iglesia; pero ¿ese reconocimiento provocará una influencia positiva en la sociedad?


La Dimensión Personal de Esta Crisis Actual.

La esencia de nuestra crisis actual es una crisis individual. Es fácil culpar a los políticos, a los bancos, las inmobiliarias, al precio del petróleo, a nuestros padres, líderes, al diablo, al clima, o a un número casi infinito de otras fuentes posibles de nuestra crisis actual. Pero el punto final es que nosotros como individuos o estamos contribuyendo a la crisis o somos parte de la solución. Es interesante notar que la palabra “crisis” no es utilizada en la Biblia. Aunque la Biblia describa muchas crisis y cómo Dios y su pueblo las manejan, la Biblia parece estar más interesada en las soluciones a las crisis que en su descripción o análisis. Jesús proveyó un contexto para entender la crisis cuando él dijo “En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo” (Juan 16:33).

Para los cristianos la crisis es una oportunidad para ver si Jesús en realidad ha vencido al mundo o no. La crisis es una oportunidad para ver operar las promesas de Dios en nuestra propia vida personal, vida familiar y vida social. La crisis es una oportunidad para confiar en Dios por lo que sólo Él puede hacer. ¡La crisis es una invitación para que el cristiano sea luz en las tinieblas! No son las actitudes o capacidades naturales las que servirán en los tiempos de crisis. Los cristianos necesitamos formar ideas, valores, y principios para tomar decisiones, para ejercer influencia y para evaluarse a sí mismo.


Durante las crisis debemos aprender cuatro lecciones importantes.

1. Un cristiano maduro fluye de un carácter maduro, una iglesia madura ha desarrollado miembros de carácter maduro.
2. El carácter maduro es formado a través de la obediencia en situaciones difíciles.
3. Muchos cristianos atraviesan situaciones difíciles sin ver cuales son los beneficios potenciales. Es importante descubrir a Dios en medio de las situaciones difíciles y aprender de Él.
4. La obediencia al Señor, en las etapas difíciles de la vida crea una profundidad del carácter divino que produce autoridad espiritual. Tienes autoridad porque has atravesado en forma victoriosa la crisis.



Juan Roberto Perez B.
Pastor en Antofagasta

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